¡Hola devoralibros! Hoy os traigo la reseña de un libro del que me hace mucha ilusión hablar: se trata de La chica del corazón de agua de Sonia Lerones. Era una de mis novedades más esperadas de este año, desde que leí un fragmento en el blog de la autora. La forma en la que hablaba de la depresión: cómo lograba retratarla, el uso de las metáforas... me llegó especialmente y me vi fuertemente reflejada en ella.
Tenía pendiente invitar a la autora a uno de los cafés literarios que organizo en Botica de lectores desde que leí el pasado año La posada Shima (que os recomiendo muchísimo y cuya reseña os dejo aquí). El lanzamiento de su nueva novela parecía el momento perfecto y menos mal que lo hice porque fue una de las experiencias más bonitas y conmovedoras que hemos tenido en la librería (y que Sonia encima sea un amor, sólo lo mejora aún más).
La chica del corazón de agua nos cuenta la historia de Petra durante el duro proceso de superar una depresión que padece desde un evento traumático que le marcó por completo. En la novela se trata el tema de las enfermedades mentales desde un punto de vista realista pero esperanzador. Además de múltiples subtramas como la pérdida, la amistad, las relaciones tóxicas, las inseguridades... un fiel reflejo, al fin y al cabo, de la sociedad, donde cada personaje tiene sus propios problemas y motivaciones. La natación se convierte en el nexo, en la forma de unión de todas estas subtramas, el canal por el que discurren las vidas de estos personajes y un punto de encuentro entre todos ellos.
Hablando de los personajes, obviamente hay que mencionar a Petra, una protagonista fuerte y llena de matices, con altibajos y sumamente real. Me encariñé mucho con ella y le he admirado mucho por ese afán de superarse, de vivir incluso en los días más oscuros. Por otro lado, tenemos a sus amigos: Leroy, Ian y Jairo. El primero es el más joven, es impetuoso también y enérgico. Me reí muchísimo con él. Pese a sus metidas de pata, me pareció muy tierno. Por otro lado Ian es muy dulce, el típico hermano mayor que siempre está ahí para protegerte. Y por último Jairo, algo callado y cerrado pero que se da cuenta de todo y siempre está dispuesto a ayudar. Me ha encantado este variopinto grupo de amigos y cómo se esfuerzan en ir aprendiendo cómo ayudar a Petra.
La novela explora el punto de vista de la protagonista que atraviesa una enfermedad mental pero también de su entorno. Ya os he hablado de sus amigos, pero un grupo muy importante también es su familia e incluso su psicóloga. La prima de Petra no es capaz de comprender realmente el problema, y no le da la importancia que merece. Representa una faceta muy habitual en estas situaciones. Por otro lado me gustó conocer a su psicologa, dejando ver que no son figuras inmunes sino que están sometidas a presión, tienen sus propios problemas e incluso a veces pueden llegar a empatizar con sus pacientes.
La prosa de Sonia es maravillosa, ha evolucionado mucho desde La posada Shima y aún más desde Fugitivo (reseña aquí). Abundan las metáforas y comparaciones, usa un lenguaje cuidado y con continuas referencias al agua. La historia es fluida, no se te hace en absoluto pesada pese al tema que trata. Te saca de vez en cuando una sonrisa aliviando el peso del tema del que se habla. Es una novela que nos muestra la otra cara de la depresión, esa que no se conoce, rompiendo mitos como que es sólo tristeza, que es pasajera... Nos habla de los vaivenes, de subidas y bajadas, de ese agotamiento y de la apatía que suele acompañar a las personas que la padecen. Pero también profundiza en los días buenos, en las personas que se esfuerzan en ayudarte, en aquellas veces que parece un pequeño problema simplemente molesto. Sonia nos habla de la realidad, de las dos caras de la moneda.
En definitiva, La chica del corazón de agua es una novela muy necesaria hoy en día, que visibiliza las enfermedades mentales de forma realista pero, a la vez, es un canto de esperanza. Un libro que sin duda se ganará vuestro corazón y que recomiendo muchísimo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario