¡Hola devoralibros! Hoy os traigo la reseña de un libro que ha pasado directamente a mi lista de favoritos: El cazador menguante, esta novela pude presentarla en la Feria del libro de Mairena del Aljarafe y me gustó tantísimo que me la leí en menos de dos días. ¡Y porque tenía que dormir, que si no, la acabo en mucho menos!
El cazador menguante nos traslada a un pequeño pueblo con no más de diez habitantes, llamado Corte del Ángel, donde de la noche a la mañana Alfonso Garrido desaparece. Su mujer, Isabel, rápidamente avisará a la policía, pero estos no le prestarán al principio demasiada atención al haber desaparecido otras veces. Sin embargo, una llamada a la esposa, dejará claro que la desaparición de Alfonso se debe a un secuestro. Es por eso, que acude el agente Antonio Yáñez, un joven agente de la Guardia Civil que se tomará muy en serio el caso y la investigación, descubriendo grandes secretos escondidos por el pueblo.
La historia se narra de forma cronológica, siendo cada capítulo equivalente al paso de un día. Además se divide en cuatro partes, correspondientes a las fases de la luna y precedidas por una hoja de color negro que narra acontecimientos del pasado vinculados con el caso que están investigando. La huella de la luna está presente en todo el libro, por ejemplo en la numeración de las páginas, donde la luna va menguando hasta desaparecer al final. Sin duda es una edición sumamente cuidada.
Centrándonos en los personajes quiero destacar cuatro: Antonio Yáñez, Amalia, Isabel y el Cabo Muñoz. El agente Yáñez es joven y al principio parece bastante tímido y torpe pero lo compensa con las ganas y con no darse por vencido. Está determinado a resolver el caso y ayudar a las Garrido y durante la historia experimentará una gran evolución. Aficionado a los casos del detective Poirot, es algo peliculero pero sin duda un gran policía. Por otro lado Amalia es la hija del desaparecido, una policía montada que viene desde Canadá para descubrir qué ha sucedido con su padre y que parece no llevarse demasiado bien con su madre. Es inteligente y algo manipuladora, y el policía entablará una gran relación con ella, hasta el punto de trabajar juntos en el caso. En cuanto a Isabel, es una mujer de ciudad que se ve atrapada en el pueblo por culpa de la herencia de su marido. Ama a Alfonso profundamente y haría cualquier cosa para recuperarlo. Además, debido a un traumático suceso de su pasado, está obsesionada con la luna y teme que cuando esta desaparezca del cielo y la noche sea oscura, su marido ya no vuelva. Es un personaje muy complejo y lleno de capas, que me ha gustado mucho (probablemente mi favorita junto al protagonista). Por otro lado, quería hablar del Cabo Muñoz, como contraste del otro policía, es un agente veterano que está algo cansado del pueblo y que no confía en Isabel cuando denuncia la desaparición de su marido. No es una mala persona, pero está acostumbrado a que en el pueblo no suceda nada de importancia, y se verá sobrepasado cuando le asignan un caso de un fugitivo y no dispone de los recursos necesarios para resolverlo. Es un personaje que aporta grandes dosis de humor, y al que con el tiempo se le va cogiendo mucho cariño.
Habiendo leído, la novela anterior del autor - La huella del inocente (reseña aquí) -, he podido observar la tremenda evolución que ha experimentado: mejores descripciones y lenguaje más cuidado, personajes complejos y más realistas y una historia que engaña una y otra vez al lector. Además, la novela alterna momentos de tensión con pequeñas dosis de humor, haciendo que este se monte en una montaña rusa de sensaciones. Es difícil combinar dos géneros aparentemente tan opuestos, sin que se pierda la intriga, pero el autor es un experto en este ámbito y los fusiona con gran maestría.
En definitiva, El cazador menguante es una novela francamente adictiva, que no te deja indiferente. Con unos personajes que esconden mil secretos, con giros totalmente inesperados en un pueblo donde nada es lo que parece y donde la luna, conforme mengua, parece querer llevarse para siempre el secreto de lo que le sucedió al cazador. Una de las mejores joyas que esconde el catálogo de Ediciones Labnar y que sin duda pasa a mi lista de novelas favoritas. ¡Os la recomiendo muchísimo!
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